El 20 de octubre de 2014 se realizó un ensayo memorable en el laboratorio del IDIEM de la Universidad de Chile en Santiago: Un muro de fardos de paja con estuco de barro fue sometido a una exhaustiva prueba de fuego. Es el primer test oficial de este tipo no solo en Chile, pero en todo el mundo hispanohablante.
El resultado es igual de extraordinario: El muro resistió más que 2 horas sin mostrar ningna debilidad, por lo que recibirá la etiqueta F-120, es decir 120 minutos de resistencia al fuego.

La probeta de muro: fardos parados y estucados en ambos lados, en una estructura de madera. La foto muestra el muro después de 2 horas de ataque de fuego (véase reloj digital a la izquierda).
La probeta a ensayar había sido realizada por voluntarios y profesionales vinculados con la construcción con fardos de paja, gracias al proyecto INNOVA BIO BIO adjudicado por el colectivo Manzana Verde de Concepción. La Red Chilena de Construcción con Fardos de Paja participó desde el primer momento.